miércoles, 16 de julio de 2014

Barrios, Ruido y Democracia por Jerónimo Verdugo

Disculpen que lo plantee así, pero creo que nuestro alcalde se ha vuelto loco. El señor Sabat ha propuesto una ordenanza municipal que regula el ruido en nuestros barrios... no es mala idea. El problema es que este hombre quiere prohibirlo todo, incluyendo “el funcionamiento de bandas en la vía pública, salvo que se trate de las Fuerzas Armadas y de Orden”. También quedaría prohibida la producción de “música de cualquier naturaleza” e incluso “a los vendedores ambulantes o estacionados, proferir gritos o pregones, usar pitos o campañillas”.

En resumidas cuentas, Sabat quiere barrios silenciosos, donde no se vendan “escobas, escobillones y escobas”, ni “humitas, frescas las humitas”, donde no se afilen los cuchillos al ritmo del pitillo tradicional o donde uno deba adivinar que el camión del gas va pasando. Pareciera que al alcalde le incomodan los ruidos que nos identifican como vecinos de Ñuñoa, ruidos “molestos” que hemos escuchado desde pequeños y que en más de alguna ocasión nos han salvado un almuerzo o una ida a la ruidosa feria.

O será que le molestan esos cabros jóvenes que tienen la mala costumbre de hacer cultura en la plaza, los que hacen batucada en el Juan XXIII, o la murga Ñuñoa Splendid de Plaza Ñuñoa, o los talleres del Centro Comunitario en Villa Olímpica. Quizás al alcalde en el fondo le resulte desagradable la alegría de los vecinos, en los carnavales del Parque Gorostiaga o el Festival Victor Jara de la Salvador Cruz Gana.

Quizás para nuestro alcalde, una comuna ideal sería aquella en que el silencio reine y en que éste solo pueda ser interrumpido por alguna banda militar para marchar uniformados con robótico paso marcial.

Porque en el fondo a esta municipalidad le molesta que nos comuniquemos, que participemos, y hasta que existamos. Por eso lo prohibe todo. Por eso le cuestiona la personalidad jurídica al Comité de Vivienda en la Exequiel en vez de tratar de resolver la dificil situación de hacinamiento en nuestras poblaciones. Por eso trata a los cabros de Villa Olímpica de delincuentes, en vez de escuchar su planteamiento por una salud integral, por eso prefiere dejar hablando solos a los cien vecinos y dirigentes del sector norte reunidos en audiencia pública que intentan salvar a nuestra comuna de la ya avanzada masacre urbana.

Para el alcalde, el ruido es molesto porque viene con personas, y las personas vienen con opinión, y lamentablemente a las opiniones hay que escucharlas, evaluarlas y eventualmente considerarlas. Todo eso es muy incómodo, es más facil decidir solo, en silencio, por la vía del decreto y la fuerza policial.

Queridos vecinos, el alcalde se ha vuelto loco... no sabe en qué mundo vive, perdió la noción del tiempo, simplemente quiere prohibir el ruido de la democracia.

* Jerónimo Verdugo es Dirigente Social de Cultura del Sur de Ñuñoa

viernes, 11 de julio de 2014

Comunicado en Rechazo a Informativo Comunal "El Ñuñoino" (julio 2014)

A partir de la nueva publicación elaborada por el informativo municipal “El Ñuñoíno”, en su edición N° 183, correspondiente al mes de julio, las organizaciones sociales que conformamos el Centro Comunitario Villa Olímpica declaramos lo siguiente:

1. Lamentamos profundamente las estrategias de difamación que ha llevado adelante el municipio con la autorización del alcalde, Sr. Pedro Sabat respecto al trabajo que desarrollamos en el espacio recuperado en calle Aristóteles #1115, en Villa Olímpica.
2. Rechazamos las lógicas manipuladoras y mal intencionadas de dicho informativo cuando argumenta “¿Para qué sirven los neumáticos viejos acumulados en el lugar?”. Es importante señalar que esos elementos se encuentran desperdigados hace mucho tiempo el lugar, los cuales no han sido utilizados para ningún tipo de manifestación violenta como pretende hacer creer el informativo municipal. 
3. Conminamos a las autoridades comunales a hacer retiro de dichos neumáticos del lugar, ya que no representan ningún aporte para las actividades que desarrollamos en el territorio, colaborando en el orden y limpieza del lugar.
4. Reiteramos nuestra permanente intención de diálogo con las respectivas autoridades comunales, las cuales en general han tenido buena acogida, con excepción de la máxima autoridad, Sr. Pedro Sabat, quién no ha permitido la generación de espacios de diálogo respecto del trabajo territorial que desarrollamos en Villa Olímpica.
5. Mantenemos nuestra posición favorable respecto de la construcción de un Centro Comunitario de Salud Familiar (CECOF) en el sector, destacando la relevancia de éste para los vecinos.
6. Junto con apoyar la construcción de un CECOF en el territorio, como organizaciones comunitarias hemos manifestado en diversas ocasiones a las autoridades relacionadas con el terreno (Ministerios de Bienes Nacionales y Municipalidad de Ñuñoa) que nuestra intención es la coexistencia de ambas iniciativas dentro del mismo lugar, implementado espacios que promuevan el cuidado de la salud y la cultura para los vecinos de Villa Olímpica y alrededores.
7. Aclaramos que la demora en la construcción del CECOF no se debe a nuestra presencia en el lugar como se afirma en el “El Ñuñoíno”, sino a que la Municipalidad no tiene los permisos de edificación que requiere para hacerlo ya actualmente el Ministerio de Bienes Nacionales se encuentra recabando antecedentes para autorizar o no el proyecto. Dicho Ministerio ha recibido de nuestra parte el proyecto que fundamenta la existencia del Centro Comunitario Villa Olímpica el que está siendo igualmente considerado por la autoridad.
8. Los diversos vecinos y personas que colaboran con el proyecto comunitario que levantamos de forma autogestionada estamos totalmente dispuestos a generar espacios de diálogo, para la toma de acuerdos con los diversos dirigentes sociales que existen en la comuna, permitiendo instancias de acercamiento que eliminen prejuicios respecto de nuestra labor dentro del territorio e incluso evaluando la potencial generación de alianzas colaborativas.
9. Invitamos a todas las autoridades comunales, dirigentes sociales y vecinos de Ñuñoa a asistir y participar de las diversas actividades que desarrollamos en el lugar, promoviendo instancias de participación ciudadana transversales que eliminen prejuicios instalados respecto de nuestra labor. Tanto las asambleas como los talleres son actividades abiertas, y en este sentido nuestra intención siempre ha sido trabajar con transparencia y espíritu democrático. 

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ASAMBLEA CENTRO COMUNITARIO VILLA OLÍMPICA